El Ayuntamiento de la Cendea de Galar se suma a la conmemoración del Día Internacional de las Mujeres Rurales, que este año lleva por lema “Mujeres rurales, del margen al centro de la política en Navarra – Landa eremuko emakumeak, Nafarroako politikaren bazterretik erdigunera”.

La campaña, impulsada por la Red de Técnicas de Igualdad de Entidades Locales y Territoriales de Navarra, quiere poner en valor el papel imprescindible de las mujeres en el medio rural y recordar la urgencia de incluir su voz en la toma de decisiones.

Desde los pueblos rurales de Navarra —que conforman la mayor parte del territorio— se reivindica el protagonismo de las mujeres que los habitan, porque siempre han sido y siguen siendo esenciales para el presente y el futuro de nuestras comunidades. Sin embargo, las políticas públicas continúan en muchos casos ignorando sus realidades y necesidades, lo que perpetúa desigualdades estructurales.

Las mujeres rurales se enfrentan a múltiples formas de discriminación, tanto por razón de género como por el hecho de vivir en entornos donde el acceso al empleo, la vivienda o el transporte resulta más limitado. A ello se suma la sobrecarga de cuidados no remunerados, los estereotipos que las relegan a papeles secundarios y la falta de recursos frente a la violencia machista en contextos rurales.

El informe sobre las mujeres rurales en Navarra (INAI/NABI, 2023) refleja que, pese a contar con una alta formación —el 28% tiene estudios universitarios frente al 20% de los hombres—, sus salarios son un 20% inferiores y solo el 28% de las explotaciones agrarias están encabezadas por mujeres. Estas cifras muestran la necesidad de políticas públicas que integren tanto la perspectiva de género como la ruralidad.

La Ley Foral 17/2019 de Igualdad y el Plan Estratégico para la Igualdad de Navarra, que prevé la creación de un Estatuto de las Mujeres Rurales, son instrumentos clave para avanzar hacia una igualdad real. Desde las entidades locales y territoriales de Navarra se considera urgente seguir trabajando en cinco líneas prioritarias:

1. Superar el modelo urbano-céntrico y patriarcal, apostando por una planificación equilibrada e inclusiva.

2. Incorporar el enfoque de género e interseccional en las políticas públicas.

3. Reconocer a las mujeres y asociaciones rurales como agentes del desarrollo.

4. Garantizar derechos básicos en todos los territorios, incluyendo servicios públicos de calidad y recursos accesibles frente a la violencia de género.

5. Invertir de forma justa en el medio rural, fomentando la igualdad en cada pueblo, en cada decisión y en cada presupuesto.

La Cendea de Galar comparte estos objetivos y se une al compromiso de construir territorios más igualitarios, sostenibles y vivos.
Porque, como recuerda la campaña de este año, sin mujeres no hay rural, y sin rural no hay futuro.

Se puede descargar el manifiesto aquí.

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